Nashla Bogaert

«Me siento querida por mi pueblo»

Basta con mirar la cara de Nashla, para saber que es una soñadora, de esas que inventan los sueños y crean la realidad. Y es que no puedo imaginar una cosa más enriquecedora para el espíritu que ayudar a la gente a cumplir sus anhelos. Pareciera salido de un cuento de hadas o de genios en lámparas mágicas, que cumplen deseos a otras personas, pero es así exactamente en la vida real, es lo que Nashla ha venido haciendo durante los últimos meses, a través de una campaña desarrollada por una conocida marca de embutidos en la República Dominicana. De hecho, no creo que ella supiera, que tener la oportunidad de entrevistarla y fotografiarla, era un sueño que acuñaba el equipo Bien-être

desde hace más de dos años; y finalmente se cumplió, gracias a Dios, a la vida, las circunstancias y a esa accesibilidad que ella mostró desde el principio.

“¿Quien es Nashla?”, fue lo primera pregunta que hice el día de la entrevista, a lo que me dijo después de pensarlo un poco, como haría cualquiera a quien le pregunten sobre sí mismo sin esperarlo: “Soy la misma niña que fui una vez. La mujer trabajadora que aspiraba ser. Una persona agradecida eternamente con la vida por lo que me ha tocado sentir y vivir, siempre buscando el rastro de la felicidad en las cosas que hago y tratando de evidenciar mi paso por la vida dejando algo que ayude a otros”. Y terminó con una frase que aún retumba dentro de mi … “Pero sobre todo, soy gente”.

Nada más cerca de la verdad. Pues cuando se trata de acceder a una personalidad de su calibre, uno está a la expectativa y se hunde en un mar de preguntas: que cómo será, que si tiene complejo de diva, si será amable o todo lo contrario… Pues resultó que Nashla es la representación viva de la humildad y el sentido de la compasión; bastó con mirar el trato que ofrecía a cada niño que participó en la elaboración de nuestra portada para saberlo.

Y es que la fama no la han hecho perder de vista quien es y lo que ha vivido para llegar al punto donde está: “A pesar de venir de una familia acomodada, desde lo catorce años decidí e informé en mi casa que me mantendría y pagaría mi universidad. Fue así como comencé a trabajar de recepcionista los sábados y días de semana en la tarde en una empresa de seguros, donde pronto me gané el puesto de jefa del departamento de salud, por la consistencia y dedicación mostrada”, me confesó. “Más adelante me enteré del casting de Divertido con

Jochy (a quien agradezco inmensamente y de quien destaco la nobleza de abrir caminos a gente nueva) y vine a la Capital a vivir sola; siendo invitada a eventos, donde a veces no tenia como transportarme o la ropa adecuada para asistir, bañándome en el gimnasio, para ahorrar algunos pesos y poder cumplir con las responsabilidades que me ayudarían a alcanzar mis ideales”.

Esta macorisana de cara risueña y espíritu inquebrantable tiene la dicha de estar viviendo su sueño, a través de cumplir los deseos de otras personas y de la apertura de su nuevo proyecto en el cual se ha enfrascado junto a su esposo David Maler y su amigo Gilberto Morillo; al cual han llamado Cacique Films, una productora de obras cinematográficas que busca hacer cine dominicano exportable y abrir oportunidades a talentos nuevos para dinamizar la industria del cine local, no sólo para actores, sino también para equipo técnico.

Y es que el cine es uno de los grandes amores de Nashla. “Desde que hice mi primera película quedé maravillada con todo lo que ahí dentro sucedía. Actores y técnicos siendo arquitectos de una historia… y yo poder ser la actriz que transmita la emoción de otra vida, tomar prestada esa piel y hacer de esto mi profesión… es increíble”.

Es esa pasión, dedicación y amor al trabajo lo que justifica los premios obtenidos en esta rama de su carrera. Desde su premiación como “Actriz de Cine” en los premios Soberano 2014 hasta su más reciente logro de recibir el “Premio del Público” al ser la más votada en la web de los premios Platino del Cine Iberoamericano, donde fue nominada junto a más de 40 actrices de Europa y América, donde muy poca gente conocía su trayectoria y aun así se destacó su trabajo.

¿Te ves es Holywood?, pregunté, a lo que me contestó tan inteligentemente como las otras veces: “más que en Holywood, me veo haciendo cine que trascienda. Pero si llega la oportunidad de Holywood, la tomo agradecida”.

En ese momento me causó satisfacción haberla elegido como portada de la revista, pues mencionó la palabra ‘gratitud’ o ‘agradecida’ en varias ocasiones. Llamó mi atención cuando me dijo: “todos somos seres humanos y deberíamos tener las mismas oportunidades. Por eso agradezco tanto cada cosa que tengo o me sucede. Hago mi ejercicio de gratitud cada día.”. “Ella sí que es una chica Bien-être”, pensé al mismo tiempo que esbozaba una sonrisa.

Y allí en Kilombo, donde ella hizo el reality “Siete días de pobreza extrema” con la fundación Un Techo para mi país, fuimos testigos del amor y camaradería que aun existe entre Nashla y la familia de Fifina y Daniel, de lo humana y sencilla que es, de la inocencia que a veces inunda su rostro sin ella siquiera sospecharlo, y de lo feliz que se siente de estar cumpliendo su sueño y ayudar a otros a cumplir los suyos.

¿Qué será lo próximo que nos presentará Nashla Bogaert? Pues la verdad no lo sé, de lo que si estoy segura es de que el éxito no abandonará a esta mujer que ha sabido a través de su vida, jugar sus cartas con amor, dedicación y respeto.